
Un día, consiguió un par de ojos sanos. La operaron y pudo ver. Cuando lo hizo, el novio le preguntó si se casaría con el, a lo que ella respondió que no, porque se dio cuenta que él era ciego.
El novio, triste, lo comprendió y se despidió de su vida. En su partida le dijo: "Tan solo te pido que cuides bien de mis ojos, que ahora son los tuyos. Te amo."